Hemisferios ibéricos - Hemisférios ibéricos

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10. HEMISFERIOS IBÉRICOS

Nos situamos ahora a comienzos de la Edad Moderna para continuar estudiando el proceso de CONSTRUCCIÓN HISTÓRICA del ESPACIO GLOBAL IBÉRICO. Es el momento de la configuración de los HEMISFERIOS IBÉRICOS. Pero antes, planteemos algunos conceptos.

El desarrollo geopolítico del Espacio Global Ibérico pasa por varias FASES que, utilizando el símil arquitectónico, denominamos de la siguiente manera:

1. La fase de PLANEAMIENTO, entre la conquista de la primera plaza ultramarina ibérica en 1415, Ceuta, y las negociaciones de finales del siglo XV y principios del XVI que dan lugar a tratados de límites como el de Tordesillas, en 1494. 

En esta fase, las Coronas ibéricas dan sus primeros pasos fuera de la Península, se miden las fuerzas, como en la batalla de Guinea de 1478, y, finalmente, se reparten derechos de exploración y conquista sobre la totalidad de la superficie de la esfera terrestre.

2. La fase de CONSTRUCCIÓN ESFÉRICA, desde principios del siglo XVI hasta la independencia portuguesa en 1640. En ella, las potencias ibéricas se afanan en cartografiar y conquistar los territorios y mares adjudicados. 

Lo hacen en paralelo y simultáneamente: España realiza la Conquista de América y el Pacífico; Portugal, el control de África y la Conquista del Índico. Ambas se encuentran en las antípodas: las islas Molucas.

El cénit y conclusión de esta fase se da entre 1580 y 1640, cuando las Coronas ibéricas se unen bajo el mismo Rey: los diferentes espacios construidos por las mismas se vinculan en una única red de intercambio y poder global. 

3. La fase de MANTENIMIENTO HEMISFÉRICO, desde 1640 hasta las independencias iberoamericanas. Tras el fin de la unidad ibérica (y por tanto, esférica), España y Portugal se dedican al refuerzo y perfilado de sus proyectos hemisféricos.

Así, España se extiende por Norteamérica, y asegura Filipinas, mientras que Portugal lo hace por Brasil y comienza a adentrarse en África. Se mejoran y redefinen los límites entre sus dominios en los tratados de Madrid y de San Ildefonso. 

4. La fase de DEMOLICIÓN (y RUINA) NACIONALISTA, desde las independencias iberoamericanas hasta la actualidad. Los imperios español y portugués y sus proyectos hemisféricos son sustituidos por un conjunto de naciones con proyectos LOCALES o REGIONALES.

Esta fase aún no ha acabado, pues parte de las sociedades del Mundo Ibérico parecen empeñadas en desarrollar proyectos geopolíticos de alcance aún menor a través de programas separatistas, como el mapuche, el catalán o el vasco. 

5. A partir del presente, y animando a un cambio de tendencia, se plantea una fase de REFORMA y RECONSTRUCCIÓN de la Comunidad de naciones ibéricas que permita levantar de nuevo la unidad parcial o total del Espacio Global Ibérico.

La sustitución de los programas geopolíticos localistas por un programa universalista permite encauzar los deseos de cambio hacia la constitución de un poder real y soberano, con capacidad de defender sus intereses a través de una agenda global propia.

Volviendo a la cartografía mostrada, se visualizan aquí los territorios y reclamos más representativos de la PRIMERA FASE del desarrollo geopolítico planteado:

1. En azul, se representa el territorio europeo de las Coronas unificadas de CASTILLA Y ARAGÓN, incluyendo su herencia italiana; en verde, el de la Corona de PORTUGAL.  
 
2. En azul claro y verde claro, se representan las superficies emergidas y marítimas del HEMISFERIO CASTELLANO y del HEMISFERIO PORTUGUÉS, respectivamente, adjudicados a través de las diferentes bulas papales y de los tratados entre las Coronas;
 
3. En rojo, se muestran las LÍNEAS DE DEMARCACIÓN de polo a polo, tanto en ORIENTE como en OCCIDENTE, establecidas como límites entre los dos Hemisferios ibéricos por el Tratado de Tordesillas.
 
4. En los colores respectivos, se dibujan las EXPEDICIONES FUNDAMENTALES castellanas y portuguesas que apoyaron este reparto: el Descubrimiento de América, por Colón, la Primera Vuelta al Mundo, por Magallanes y Elcano, y la Llegada a la India por Vasco da Gama.
 
5. En rayado, se muestra el espacio de la CRISTIANDAD. Los territorios de los reinos cristianos se encuentran fuera del reparto acordado por las dos Coronas, pero están vinculados a la figura del Emperador cristiano, cuyo título fue conseguido por Carlos I de España.
 
El reparto lusohispano del mundo constituye la PRIMERA DIVISIÓN POLÍTICO-ADMINISTRATIVA GLOBAL de la Historia: es la primera que contempla la TOTALIDAD DE LA SUPERFICIE TERRESTRE a partir del CONOCIMIENTO REAL Y EFECTIVO del territorio mediante su exploración y conquista.
 
A pesar de su novedad, este reparto es esencialmente INDISTINTO de los establecidos en tiempos de la RECONQUISTA entre los reinos cristianos en su avance hacia el sur. A través de una relación de homotecia, el anterior TABLERO PENINSULAR es transformado en un TABLERO GLOBAL.

Este momento es ÚNICO en la Historia: desde entonces y hasta la fecha, no ha vuelto a aparecer un conjunto de entidades soberanas con pretensiones y reclamaciones de soberanía sobre la totalidad de las TIERRAS y MARES de la superficie del planeta.
 

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